CAMBIOS EN EE.UU.: EL CRUCIAL PROGRAMA SANITARIO DEL JEFE DE LA CASA BLANCA
Fuerte ofensiva de Obama para defender su reforma de salud
Hoy promulgará la ley y lanzará
una campaña para explicar sus
beneficios a los estadounidenses.
Debe revertir el mensaje de los
republicanos que han tachado el plan
de comunista. Varios
estados querellarán la ley
por inconstitucional.
Fuente: WASHINGTON. CORRESPONSAL
"Respondimos el llamado de la historia", dijo el presidente a la madrugada. Ayer todavía no estaba claro, sin embargo, si este triunfo le permitirá a Obama recuperar la iniciativa de su presidencia o si, por el contrario, terminará por hundirla. Algunos analistas llegaron a sugerir que, con la reforma del sistema de salud, Obama ha cometido un "suicidio político".
De hecho, los sondeos de opinión indican que la mayoría de los estadounidenses están en contra de la reforma aprobada y muchos han prometido que castigarán a los legisladores demócratas en las urnas. Las elecciones legislativas de noviembre podrían transformarse en un verdadero referéndum sobre la reforma de Salud.
Obama es consciente de este riesgo. Pero, está determinado a seguir la pelea hasta el final. Después de promulgar oficialmente la ley, hoy, durante una ceremonia en la Casa Blanca, Obama iniciará en Iowa una campaña por todo el país para explicar los verdaderos beneficios de la nueva legislación para el estadounidense medio
"La verdadera batalla política sobre la reforma del sistema de salud comienza ahora que ha sido aprobada", explicó el estratega demócrata Chris Kofinis. "No dejaremos que los republicanos nos saquen ventaja con el mensaje como lo hicieron el
Uno de los grandes problemas que enfrentó la reforma de Obama fue que los republicanos la calificaron con mucho éxito de "comunista" y "socializante". Sembraron la idea de que la reforma saldría carísima, que multiplicaría el ya abultado déficit fiscal. Asustaron a la gente hablando de "paneles de la muerte" que decidirán sobre la vida y la muerte de los pacientes terminales. También dijeron que los fondos previstos en la ley serían destinados a abortos.
"Los estadounidenses están enojados con esta reforma y los demócratas pagarán un precio en noviembre", dijo ayer el senador republicano John McCain.
Revertir el mensaje republicano no será fácil. La "América Profunda" es muy conservadora. Obama sin embargo ya comenzó a preparar el terreno. A cada diputado demócrata proveniente de un estado conservador que puso en juego su banca votando a favor de la reforma, la Casa Blanca le dio un análisis de los beneficios que la reforma aportará específicamente a los residentes de sus respectivos distritos.
Por ejemplo al diputado John Boccieri, un demócrata de Ohio, le dijeron que pusiera énfasis sobre el hecho de que gracias a la reforma, los 38.000 residentes de su distrito, que no tienen cobertura médica, ahora tendrán una; los 9.800 residentes que no podían conseguir un seguro médico que los cubriera porque padecen una enfermedad ahora podrán obtener uno; 49.000 jóvenes podrán permanecen en los seguros de sus padres el tiempo que quieran, y unos 110.000 se beneficiarán de la mejoras que la reforma prevé para el sistema llamado Medicare.
Los republicanos están haciendo todo lo posible para bloquear en el Senado una segunda ley votada el domingo tras la aprobación de la reforma. Este segundo proyecto de ley, de 152 páginas, contiene las modificaciones a la reforma que aprobó el Senado el pasado 24 de diciembre y que fueron prometidas a los demócratas reacios en la Cámara Baja. El proyecto de ley amplía los subsidios a familias pobres para la compra de un seguro, incrementa los impuestos para los más ricos y elimina los elementos "edulcorantes" prometidos a ciertos senadores a cambio de su voto. Si los republicanos logran bloquearlas, la reforma se instrumentará tal como fue votada el domingo a la noche en la Cámara de Representantes.
La reforma fue votada con 219 votos a favor y 212 en contra, y extiende la cobertura de salud a 32 millones de estadounidenses que no la tienen, reduce los déficit federales y prohíbe a las aseguradoras negar servicios a quienes están enfermos.
Con todo, los fiscales generales de al menos una docena de estados republicanos anunciaron que preparan querellas acerca de la constitucionalidad de la iniciativa aprobada el domingo. Pero el vocero de la Casa Blanca, Roberg Gibss, no se mostró muy preocupado al respecto. "No tienen argumentos legales sólidos", aclaró.
LA DEBACLE DE LA CAMPAÑA OPOSITORA A LA REFORMA
Una victoria que venció al miedo
Fuente: The New York Times
Y del otro lado, esto es lo que tenía para decir Newt Gingrich, el republicano que fue presidente de la Cámara -un hombre celebrado por muchos como un líder intelectual: Si los demócratas aprueban la reforma de salud, "destrozarán a su partido como Lyndon Johnson destrozó el Partido Demócrata durante 40 años" promulgando la legislación sobre derechos civiles.
Lo que quiero es que consideren el contraste: por un lado, el argumento de cierre fue un llamado a nuestros ángeles más buenos, instando a los políticos a hacer lo que corresponde, aunque afecte sus carreras; por el otro, el cinismo cruel. Piensen en lo que significa condenar la reforma de salud comparándola con la Ley de Derechos Civiles. ¿Quién, ahora, en EE.UU. diría que Johnson se equivocó al impulsar la igualdad racial?
Sí, algunos intelectuales conservadores, después de hacer ostentación de pensar los temas, afirmaron que se sentían perturbados por las consecuencias fiscales de la reforma. Pero el núcleo emocional fue promover el miedo, sin ninguna traba ni sentido alguno de la decencia.
No fue solamente la calumnia sobre los paneles de la muerte. Fue el odio racial, como un artículo del Investor's Business Daily declarando que la reforma de salud "es acción afirmativa con esteroides, que decide todo, desde quién es médico hasta quién recibe tratamiento sobre la base del color de la piel". Fue la insistencia en que hay algo tiránico en el hecho de dar a jóvenes trabajadores estadounidenses la certeza de que tendrán a su disposición atención médica cuando la necesiten, una certeza que los estadounidenses mayores disfrutan desde que Lyndon Johnson impulsó Medicare pese a los alaridos de los conservadores. Y seamos claros: la campaña de miedo no fue llevada a cabo por una franja radical, desconectada del establishment republicano.
Sin duda, la campaña del miedo fue efectiva: la reforma pasó de ser altamente popular a una amplia desaprobación, pese a que las cifras mejoraron últimamente. Pero la cuestión era, ¿sería suficiente como para frenar la reforma? Y la respuesta es no. Se trata, por supuesto, de una victoria política para Obama. Pero también es una victoria para el alma de EE.UU. A la larga, una ofensiva de miedo viciosa e inescrupulosa no consiguió frenar la reforma. Esta vez, el miedo pasó de largo.
CLAVES DE LA REFORMA SANITARIA VOTADALa nueva ley sanitaria
El
Congreso
aprobó
una
vasta
reforma
del
sistema
de
atención
a la
salud en
A quiénes cubre: Alcanzará a 32 millones de personas que hoy no tienen seguro médico. La gran expansión comenzará en el 2014. Cuando esté completa, el 95% de los estadounidenses que califiquen para una cobertura la tendrán, comparado con el 83% actual. Todo costará 940.000 millones de dólares en 10 años. Cómo será el sistema: Casi todo el mundo tendrá que estar asegurado o pagará una multa. Desde ahora, las aseguradoras no podrán fijar límites monetarios a los seguros de por vida ni negar cobertura a niños a causa de enfermedades preexistentes ni cancelar pólizas porque alguien se enferma. Las aseguradoras no podrán negar cobertura a personas con problemas de salud, ni cobrarles más. Qué cedió Obama: El presidente pretendía introducir un organismo federal que controlara todo el sistema pero esa intención quedó excluida en las negociaciones. Lo mismo ocurrió con la creación de un sistema estatal -la llamada "opción pública"- cuya función central sería competir con las aseguradoras privadas y marcar una tendencia en las prestaciones y los costos que podrían cubrir. Al mismo tiempo, para favorecer a los grupos más conservadores, la ley no será usada para intervenir en abortos. |
WASHINGTON (AP) - La histórica ley federal de salud no será suficiente para reducir las diferencias en la atención y en los niveles de desempleo entre los distintos grupos raciales, señaló la Liga Nacional Urbana en un informe anual divulgado el miércoles, que abordó también por primera vez asuntos de los hispanos.
En el reporte, la organización instó al presidente Barack Obama a promover un "aumento del empleo" que apunte específicamente las comunidades más afectadas por la crisis financiera.
En su reporte anual "State of Black America", la organización, fundada hace 100 años, señaló que los afroestadounidenses han tenido avances en materia de igualdad en general respecto de los blancos, un fenómeno medido en parte por su alta participación en las elecciones del 2008. Sin embargo, los negros siguen rezagados en temas como el porcentaje de habitantes que poseen una vivienda, y tienen dos veces más propensión al desempleo y a la falta de seguro de salud.
El estudio de 151 páginas, que en el 2007 incluyó un prólogo del entonces senador Obama, donde destacaba los problemas de los negros, deja claro que aprecia los esfuerzos realizados hasta ahora por el mandatario.
Pero "falta mucho, mucho más por hacer", añadió.
En busca de ampliar sus alcances, el reporte aborda por primera vez los temas de desigualdad de los hispanos, el grupo demográfico que más rápido crece en Estados Unidos. Destacó que los latinos enfrentan muchos problemas similares a los que viven los negros y que, en algunos aspectos, están incluso más rezagados, como en participación de los votantes, cobertura de seguro de salud y matriculación en instituciones de educación superior.
"Ahora es el momento de una robusta iniciativa de empleos", dijo Marc Morial, presidente y director general de la Liga Nacional Urbana.
"Creo que la iniciativa de salud es una parte muy importante e histórica de la legislación, que generará también empleos en el largo plazo. Pero no tendrá efectos inmediatos", dijo Morial a The Associated Press. "En el corto plazo, podríamos ver un desempleo que sigue alto. Eso es inaceptable cuando el Congreso y el presidente destinaron un monto considerable de dinero a rescatar a los bancos y a las empresas automotrices".
El reporte incluye discusiones y ensayos sobre políticas, de parte de académicos, líderes empresariales y miembros del gobierno de Obama, como la secretaria del Trabajo, Hilda Solís, y el secretario de Educación, Arne Duncan.
CO-SIGNER
de Barack Obama <info@barackobama.com>
para Juan Martin Nuñez <farodelautopia@gmail.com>
fecha23 de marzo de 2010 16:16
asunto Juan Martin, add your name to mine
Juan Martin --
I'm writing to you on a
great day for America.
This morning, I gathered with members of Congress, my administration,
and hardworking volunteers from every part of the country to sign
comprehensive health care reform into law. Thanks to the
immeasurable efforts of so many, the dream of reform is now a
reality.
The bill I just signed puts Americans in charge of our own health
care by enacting three key changes:
It establishes the toughest patient protections in history.
It guarantees all Americans affordable health insurance options,
extending coverage to 32 million who are currently uninsured.
And it reduces the cost of care -- cutting over 1 trillion dollars
from the federal deficit over the next two decades.
To ensure a successful, stable transition, many of these changes
will phase into full effect over the next several years.
But for millions of
Americans, many of the benefits of reform will begin this year --
some even taking effect this afternoon. Here are just a few examples:
Small businesses will receive significant tax cuts, this year,
to help them afford health coverage for all their employees.
Seniors will receive a rebate to reduce drug costs not yet
covered under Medicare.
Young people will be allowed coverage under their parents'
plan until the age of 26.
Early retirees will receive help to reduce premium costs.
Children will be protected against discrimination on the
basis of medical history.
Uninsured Americans with pre-existing conditions can join a
special high-risk pool to get the coverage they need, starting in
just 90 days.
Insured Americans will be protected from seeing their
insurance revoked when they get sick, or facing restrictive annual
limits on the care they receive.
All Americans will benefit from significant new investments
to train primary care doctors, nurses, and public health
professionals, and the creation of state-level consumer assistance
programs to help all patients understand and defend our new rights.
As I've said many times, and as I know to be true, this astounding
victory could not have been achieved without your tireless efforts.
So as we celebrate this great day, I want to invite you to add your
name where it belongs: alongside mine as a co-signer of this
historic legislation. Organizing for America will record the names
of co-signers as a permanent commemoration of those who came
together to make this moment possible -- all of you who refused to
give up until the dream of many generations for affordable, quality
care for all Americans was finally fulfilled.
So, if you haven't yet, please add your name as a proud health
care reform co-signer today:
http://my.barackobama.com/cosigner
Please accept my thanks
for your voice, for your courage, and for your indispensable
partnership in the great work of creating change.
History, and I, are in your debt.
President Barack Obama
Paid for by Organizing for America, a project of the
Democratic National Committee -- 430 South Capitol Street SE,
Washington, D.C. 20003. This communication is not authorized by any
candidate or candidate's committee.
This email was sent to:
farodelautopia@gmail.com
Congratulations Mr.President Barack Obama, your step is a big step for USA and immense for Mankind , you show political example for other countries and make history really. Thanks for your words, of course I also added my name as a proud health care reform co-signer with you. Juan Martín Nuñez - farodelautopia@gmail.com