jueves 21 de enero 2010
Por Jeff Mason y Kevin Drawbaugh
WASHINGTON (Reuters) - El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, propuso el jueves límites más estrictos a la toma de riesgo por parte de los bancos, un anuncio de matiz populista que provocaba una caída de los títulos del sector y que busca apuntalar su base política.
Obama propuso nuevas reglas para prevenir que los bancos o las instituciones financieras dueñas de bancos posean, inviertan o patrocinen fondos de cobertura o fondos de capital privado.
Las reglas prohibirán además las transacciones con recursos propios, que son usualmente usadas por las entidades para mejorar sus resultados contables.
Las transacciones con recursos propios son aquellas en las que los bancos apuestan en los mercados financieros su propio dinero, en lugar de ejecutar operaciones para clientes.
Estas operaciones sofisticadas, que pueden apostar a las baja y alza de acciones y de otros instrumentos financieros, han sido muy rentables para los bancos, pero además han elevado la volatilidad en los mercados.
El anuncio llegó el mismo día en que Goldman Sachs Group Inc reportó ganancias mucho más altas a las esperadas en el cuarto trimestre, y a una devastadora derrota política del partido Demócrata de Obama del martes.
"Tenemos que promulgar reformas de sentido común, que protejan a los contribuyentes y a la economía estadounidense de las crisis futuras", dijo Obama a periodistas, arropado por sus principales asesores económicos y congresistas clave.
"En años recientes, demasiadas firmas financieras han puesto en riesgo el dinero de los contribuyentes a través de la gestión de fondos de cobertura y capital privado, y de inversiones riesgosas para obtener retornos rápidos", añadió.
Las acciones de algunos de los bancos más grandes, que podrían verse impactado por las medidas, caían.
Los papeles de JPMorgan Chase & Co, que perdían un 5 por ciento, presionaban al promedios industrial Dow Jones.
Los títulos de Citigroup Inc bajaban un 4 por ciento y los de Bank of America Corp retrocedían un 5,7 por ciento, mientras que los de Goldman Sachs se desplomaban un 5,3 por ciento, pese a sus fuertes ganancias.
Obama propuso además limitar la consolidación en el sector financiero, restringiendo el crecimiento de participación de mercado de los pasivos en las grandes firmas financieras y complementando los límites existentes para las participaciones en depósitos.
(Reporte adicional de Caren Bohan y Ross Colvin. Editado en español por Javier López de Lérida)
En el marco de
una derrota electoral y la caída de la aprobación de su
gestión, el presidente de EE.UU., Barack Obama, buscó ayer
empaparse de los problemas de la calle en encuentros
populares en los que
prometió a los trabajadores que "luchará siempre" para
defender sus derechos. Obama protagonizó ayer una
nueva "asamblea popular", un registro en el que se
desenvuelve con comodidad. Esta vez eligió la localidad de
Elyria, en Ohio, un estado devastado por la recesión.
Se trató de una
nueva etapa de lo que la Casa Blanca llama el "Main Street
Tour", es decir, la gira por las calles de la gente común,
pero a la vez un juego de palabras contra "Wall Street",
donde se concentran los intereses económicos acusados de
haber generado la crisis y la recesión.
Este viaje fue el primero de su segundo año en el poder y el
primero después de la derrota electoral en Massachusetts,
donde los republicanos se quedaron con la banca que el
fallecido Edward Kennedy dejó vacante en el Senado.
"Nunca dejaré de
luchar por darle a cada estadounidense una oportunidad
justa" de alcanzar el sueño americano, afirmó. "Mientras sea
presidente -agregó-, nunca dejaré de protegerlos de las
prácticas engañosas que hemos visto de parte de algunos en
el sector financiero. (...) Yo fui candidato para que
nuestra economía funcione y no para la élite, sí para las
personas que trabajan duro (...) y sí para ocuparme de los
desmesurados costos de la salud que afectan la economía de
las familias, de los comercios y de nuestro país", dijo
Obama, quien se comprometió a pelear para lograr la reforma
sanitaria.
"En lo que
respecta al sistema financiero -dijo- es importante que
existan reglas claras que eviten que cuando esta gente toma
decisiones sean ustedes los que paguen la cuenta".
Obama había visitado Elyria durante la campaña, cuando el
índice de desocupación estaba todavía en el 6,9%. Hoy,
después de un año en la presidencia, el índice de desempleo
en Ohio es incluso superior al nacional: 10,9%. Obama habló
en el salón municipal del condado de Lorain.
"Yo sé que han sido
tiempos difíciles", reconoció. Pero, "gracias a las medidas
que tomamos" para salvar a los bancos y las automotrices, y
poner en marcha el proyecto de estímulo económico, "lo peor
de la tormenta ya pasó", aseguró un Obama optimista.