El Principito cumple 70 y sigue siendo uno de los más leídos del mundo

POR PATRICIA SUÁREZ

El relato, escritor por Antoine de Saint-Exupery, fue y es una iniciación en la lectura para millones de personas.

 

06/04/13

 

  

Un chico de otro planeta. El Principito en su mundo: los dibujos también son del autor piloto francés.      Saint-Exupery desapareció en su avión en 1944.

Después de La Biblia, El Corán y tal vez de El Capital de Marx, El Principito es el libro más leído en el mundo, traducido a 180 lenguas y dialectos. Fue el último texto publicado en vida por su autor, un aviador francés, de 43 años, de nombre Antoine de Saint-Exupéry, al que llamaban Saint-Ex. Ya había escrito otras cosas como Tierra de hombres –que suele considerarse su mejor novela y a la que el escritor argentino Fabián Casas considera de imprescindible lectura– o Vuelo Nocturno. Entre 1929 y 1930 estuvo por Argentina, para hacerse cargo de la Compañía Aeropostale Argentina, ya que habían creado la línea de Patagonia que unía Buenos Aires y Punta Arenas, línea que acabó con el aislamiento de los pueblos del sur. En su estadía en nuestro país pasó largas veladas con Victoria Ocampo, quien después le editaría la novela Correo del Sur en SUR.

No obstante, por ninguno de todos sus libros fue reconocido como por aquel que narra las aventuras de un pequeño príncipe de cabello enrulado y largo abrigo (las ilustraciones son del mismo Saint-Ex), dueño de tres volcanes y una rosa en su planeta y problematizado por el crecimiento enredado de los baobabs. En el desierto solitario, el Principito se encuentra con el narrador, un aviador con su máquina descompuesta. Le habla de un Zorro, metáfora del amigo ideal, que todos los lectores guardaremos para siempre. Un día, el Principito decide regresar a su planeta y para eso se hace morder por una serpiente. Vuelve a su planeta en espíritu, porque su cuerpo queda en brazos del aviador. Sin duda, un libro metafórico sobre la importancia de la libertad y el amor al prójimo, teñido de una melancolía tal que le arranca lágrimas al más pintado. Michéle Petit, una de las teóricas de la lectura más importantes hoy día, comenta en su libro Una infancia en el país de los libros que al leer El Principito a los ocho años concluyó entristecida que el arte y la literatura “no servían más que para revelarnos lo infortunado de nuestra condición”.

No todos los lectores –sobre todo los niños– reciben a El Principito con palmas de alegría, pero ninguno permanecerá indiferente a su lectura. El texto dejará una huella imperecedera. Todos conocemos el cuento de Caperucita Roja, haya llegado a nosotros a través de la fuente que nos haya llegado (oral, película, adaptaciones del original) y quizás nunca nos interese conocer la versión original de la nena con la capota roja devorada por el lobo feroz. Esta indiferencia es imposible con El Principito: él es la versión original. Más allá de los productos fílmicos y teatrales que hubo sobre el personaje, el pequeño príncipe tuvo émulos en el estilo de escritura, haciendo pie en la metáfora, como Juan Salvador Gaviota, o en argumentos sobre niños de las estrellas con una sabiduría especial como Ami, de Enrique Barrios o, más recientemente, Oups de Kurt Hörtenhuber. De más está decir que en calidad y profundidad no le llegan al Principito a los talones: la frescura de Saint-Ex provenía posiblemente de sus reflexiones durante los largos vuelos. Los otros, son la idiotez del mercado.

El 31 de julio de 1944, durante una misión de reconocimiento en el sur de Francia, Saint-Exupéry iba a bordo del avión Lightning P-38. Había partido pocas horas antes de la isla de Córcega, cuando los radares dejaron de ver el avión que pilotaba y nunca más se supo de él. La desaparición cubrió al escritor y piloto de un halo de misterio: de alguna manera se fue de este mundo como se fue su pequeño príncipe. No obstante, en 1998, un pescador halló en las aguas de Marsella una pulsera que pudo haber sido de Saint-Ex. Diez años después, un ex piloto alemán llamado Horst Rippert confesó al diario francés La Provence que había sido él quien derribara el avión de Saint-Exupéry. El ex militar de 88 años declaró: “Pueden dejar de buscar. Fui yo quien abatió a Saint-Exupéry”, y agregó: “Fue después cuando supe que se trataba del escritor. Yo esperaba que no fuera él, porque en nuestra juventud todos habíamos leído sus libros y los adorábamos.” Ya sea que Rippert de verdad acabó con el escritor o que es la declaración de un anciano gagá, lo real es que a Saint-Ex ni siquiera sus enemigos dejaban de leerlo. Saint-Ex escribió: “No era más que un zorro semejante a cien mil otros. Pero yo le hice mi amigo y ahora es único en el mundo”: tal vez éste es el misterio que se opera en nosotros: uno se vuelve amigo del Principito. Y sucede después que a los libros, a veces, se los olvida, pero los amigos nunca jamás entrarán en el corredor del olvido. Larga vida al Principito.

 

Saint Exupéry en la Patagonia

Hace mas de 100 años, el 29 de junio de 1900 nacía en Lyon, Francia, Antoine de Saint Exupéry. El célebre autor de El Principito, estaba destinado a crear lazos de afecto, inspiración y amor con la Argentina, y en particular con nuestra Patagonia.

Saint Exupéry es uno de los escritores y viajeros famosos que han recorrido y reflejado en su obra esta porción del continente americano. Queremos recordar una pequeña porción de su vida, la que lo liga a esta región, tan lejana de su Francia natal, pero tan cercana en sus afectos, sus cartas y sus libros.

Saint Exupéry llegó a la Argentina el 12 de octubre de 1929, junto con Jean Mermoz y Guillaumet, sus compañeros en la aviación. Fue el fundador y primer piloto de la Aeroposta
Argentina
, la primera compañía de aviación del país. Esta línea estaba dedicada fundamentalmente al transporte de correspondencia, el negocio de la época, aunque también llevaba, esporádicamente, pasajeros. El primer vuelo se realizó el 20 de octubre de 1929, entre Buenos Aires y Comodoro Rivadavia. Las escalas fueron en San Antonio Oeste, cuyo Aeródromo lleva hoy el nombre de Saint Exupéry, y Trelew, donde se cuenta que nuestro piloto recogió una foca.

     

La impresión que le causaron los paisajes patagónicos aparece plasmada en su correspondencia. Leemos lo que escribe en una carta a su madre, intentando describir estos lugares desde el cielo:

  “¡Qué bello país y cómo es de extraordinaria la Cordillera de los Andes! Me encontré a 6500 metros de altitud, en el nacimiento de una tormenta de nieve. Todos los picos lanzaban nieve como volcanes y me parecía que toda la montaña comenzaba a hervir…”

Sus funciones no se limitaban a los vuelos comerciales sino que también efectuó vuelos de reconocimiento, rondas de inspección y raids hasta Tierra del Fuego. Muchos de estos vuelos cotidianos, de 18 horas de duración, se realizaban de noche, lo que lo inspiró para comenzar a escribir, entre dos misiones, “un libro sobre el vuelo de noche”, el que será finalmente Vuelo Nocturno, publicado a su regreso en Francia, en 1931.

  En junio de 1930 se perdió en la cordillera su compañero Guillaumet, durante una tormenta. Por días y días, Saint Exupéry sobrevoló los Andes buscándolo o buscando alguna señal de él. Nadie quería acompañarlo en una excursión por tierra, ya que la sabiduría de los baqueanos dice que los Andes, en invierno, no devuelven a los hombres. Escribe, entonces, en una carta imaginaria a su amigo, que luego formará parte de su libro Tierra de Hombres:

“…Y cuando de nuevo me deslizaba entre los muros de los pilares gigantes de los Andes, me parecía que ya no te buscaba, sino que velaba tu cuerpo en silencio, dentro de una catedral de nieve…”

Increíblemente, después de cinco días de errar, el piloto fue encontrado sano y salvo. La historia de su travesía heroica en la cordillera, escuchada tantas veces por Saint Exupéry, está contada con lujo de detalles y poesía, en el mismo libro que mencionamos, Tierra de Hombres.

  En enero de 1931, después de quince meses de estadía en nuestro país, volvió a Francia. Su propósito, en principio era simplemente tomarse unas vacaciones, las que serían aprovechadas para casarse con una joven, Consuelo Suncin, que le había sido presentada en Buenos Aires. Estando en Europa, la compañía Aeropostal Argentina se declaró en quiebra y Saint Exupéry ya no volvería a la Argentina.

En 1943 escribiría su obra corta más conocida: El Principito, donde una de sus ilustraciones sobre una boa que traga un elefante tendría un parecido bastante particular con la silueta de la Isla de los Pájaros…

Su novela Vol de Nuit (Vuelo nocturno), que habla sobre los inicios del Servicio Postal Aéreo Sudamericano, fue llevada la pantalla grande por la compañía Metro Goldwym Meyer.

Su avión

  El Laté 25, el avión utilizado por Antonio de Saint Exupéry en la Aeropostal Argentina, llegó a nuestro país en 1929, piloteado por el propio Saint Exupéry, a pedido de Jean Mermoz. Después de casi cuarenta años de abandono, ha sido restaurado, a principios de este año, respetando, en la medida de lo posible, los materiales originales de su construcción. Fue presentado en el mes de abril en los hangares de la Fuerza Aérea de la ciudad de Quilmes, Provincia de Buenos Aires, y allí se encuentra expuesto al público en general.

Este avión es un monoplano que podía transportar una tonelada de mercadería y recorrer una media de 5.000 km. sin dificultades. Puede servirnos como ejemplo del adelanto técnico que representaba para la época el saber que unía Buenos Aires con Comodoro Rivadavia a una velocidad promedio de 174 km/h.

   Entre las travesías más importantes que lo tuvieron como protagonista figura la inauguración de la ruta Bahía Blanca-Río Gallegos, dos ciudades que hasta entonces sólo podían unirse por mar.

Para terminar, sólo podemos añadir una frase de Jean Canesi, un autor francés que está de acuerdo con los comentaristas que dicen que fue en la Patagonia donde Saint Exupéry concibió el personaje de El Principito:

“En realidad no sería nada sorprendente, pues en esta región primitiva es muy fácil dormirse a mil leguas de cualquier lugar habitado, en el polvo, entre las manadas de ovejas y despertarse una mañana con una vocecita que nos dice “Por favor, ¡dibújame una Patagonia!”

Para Patagonia-Argentina.com, Marita Alasio.

ALGUN ANTECEDENTE DE LOS INICIOS DE LA AVIACION EN EL PAÍS:

La aviación argentina a comienzos del siglo

En 1907 el Dr. José Figueroa Alcorta gobierna la Nación. Durante este período Aarón de Anchorena, secretario de la Legación Argentina en Francia, es invitado por el Ing. Santos Dumont a una ascensión en globo libre. La experiencia resulta estimulante para el funcionario argentino quien de inmediato se asocia al Aeroclub de Francia y adquiere un aeróstato de 1200 m3 al que bautiza El Pampero. En 1907 introduce el aeróstato en nuestro país con la finalidad de interesar en tal deporte a sus amistades y a los ministros de Guerra y Marina.  

El Pampero.

Uno de sus amigos es el ingeniero Jorge Alejandro Newbery, director de alumbrado de la ciudad de Bs. As.; otro es el barón Antonio de Marchi, fundador de la Sociedad Sportiva Argentina desde donde el 25 de diciembre despegaron Anchorena y Newbery en el primer cruce del Río de la Plata, descendiendo a 7 Km. de la costa en la R.O. del Uruguay. Tal fue el entusiasmo producido por el hecho que el 13 de enero de 1908 Anchorena  funda el Aeroclub Argentino  que sería durante largos años la institución rectora de la Aeronáutica Nacional, pese a su carácter privado y deportivo.  

Anchorena y Newbery en el Pampero.

El 17 de octubre de 1908 se eleva por última vez desde la quinta Los Ombúes en el barrio de Belgrano, Eduardo Newbery y el sargento primero Romero realizaría un raid nocturno, nunca volvería a saberse nada del Pampero ni de sus tripulantes que fueron vistos por última vez sobre la localidad de El Palomar y encontrándose restos en Moreno.

La angustia fue tanta y sumada la falta de un aeróstato que se disuelve provisoriamente el Aeroclub Argentino.

En enero de 1909 se consigue el aeróstato Patriota y se reanuda la actividad del aeroclub, sumando luego varios aeróstatos más, El Huracán, Condor, Argentina, Centenario, Los Andes y otros.  //// ...

El 25 de mayo de 1913 ya creada la Escuela de Aviación Militar se realiza un desfile aéreo en el Hipódromo Argentino de Palermo.

En 1914 fallece Jorge Newbery en sus preparativos del cruce de los Andes en la provincia de Mendoza, poco después Alberto Mascías intentaba el cruce con el avión de Newbery pero fracasó. Dos años más tarde lo consigue en el globo E. Newbery.

Las actividades aerocomerciales se inician el 10 de Junio de 1919 con la empresa fundada por S.H. Kingsley y vuelos que unían Buenos Aires con otras ciudades de la Argentina y con Montevideo en el Uruguay. En un avión De Havilland se transportan los primeros pasajeros a través del Río de la Plata. Realizan de 8.750 Km. de vuelo cubriendo las más importantes ciudades del inmenso territorio argentino, hasta que los avatares económicos propios de esta nueva actividad le impiden proseguir la actividad.

En marzo de 1920 el argentino A. Almonacid cruza los andes en un vuelo nocturno con un avión Spad de 220 hp. aunque en abril de 1919 ya lo había conseguido el chileno D. Godoy en un Blériot de 110 hp.

Ese mismo año la Misión Aeronáutica Francesa efectúa experimentalmente la unión Buenos Aires – Mendoza con una línea aérea.

El 26 de abril de 1921 se funda el aeroclub de Pergamino.

El 18 de mayo de 1922 se firma en Buenos Aires un convenio de aeronavegación entre Argentina y Uruguay.

Como hecho destacado de 1923 Shirley Kingsley efectúa el raid San Isidro-Córdoba-San Isidro con 4 pasajeros en el biplano Airco 16 y en 1927 efectúa con éxito las primeras pruebas de un biplano Moth 60 en El Palomar.

Se funda Aeroposta Argentina el 5 de septiembre del mismo año y con fuertes vínculos con la empresa francesa Latecoere comienza sus vuelos regulares en enero de 1929 con aviones Breguet 14-A-2 y Laté 25, hecho que con el tiempo sería fundamental para la creación de Aerolíneas Argentinas, la cual no fue creada premeditadamente, sino que fue el resultado de un proceso de afirmación de la capacidad argentina para volar a todas las latitudes, llegar con su bandera a todos los aeropuertos y constituir la unión entre los argentinos y el exterior, o viceversa.

 El célebre piloto-escritor Antoine Saint Exupery (El principito), formó parte del plantel de pilotos de Aeroposta y sus libros (Vuelo nocturno, Tierra de Hombres) describen, experiencia personal mediante el esfuerzo, sacrificio y valentía que implicó la apertura de rutas comerciales  en el sur argentino, donde hombres y máquinas se enfrentaron a un ambiente hostil y sin soporte logístico, algunas veces el viento era tan intenso que impedía avanzar a los aviones y para decolar los aviones eran retenidos por el personal de tierra mediante cuerdas y al soltarlas el avión prácticamente decolaba sólo, el motor no era necesario para ejecutar esta maniobra.

 

 

Antoine de Saint-Exupéry

 
 
Antoine de Saint-Exupéry
Antoine de Saint-Exupéry.jpg
Fotografía de Antoine de Saint-Exupéry en un lago cerca de Montreal, Canadá, en mayo de 1942.
Nacimiento 29 de junio de 1900
Bandera de Francia Lyon, Francia
Defunción 31 de julio de 1944
Mar Mediterráneo, cerca de la costa de Marsella
Ocupación Escritor y piloto
Nacionalidad Francesa
Género Autobiografía, literatura infantil
Firma Antoine de Saint-Exupéry signature.svg

Antoine Marie Jean-Baptiste Roger de Saint-Exupéry1 (Lyon, 29 de junio de 1900 Mar Mediterráneo, cerca de la costa de Marsella, 31 de julio de 1944) fue un escritory aviador francés, autor de la famosa obra El principito, nacido en una familia noble deLyon.

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[editar]Accidente en el desierto

El 30 de diciembre de 1935 a las 14:45, después de un viaje de 19 horas y 38 minutos, Saint-Exupery junto con su navegador Andre Prevot tuvieron un aterrizaje forzoso en la parte de Libia del desierto del Sáhara en camino a Saigón. Su avión era un Caudron C-630 Simoun n7041 (matrícula F-ANRY). El equipo estaba tratando de volar desde París a Saigón en menos tiempo que cualquier piloto lo había hecho, por un premio de 150.000 francos. Ambos sobrevivieron al aterrizaje pero sufrieron los estragos de la rápida deshidratación en el Sahara. No tenían idea de su ubicación. De acuerdo a sus memorias, lo único que tenían para alimentarse eran uvas, dos naranjas y una pequeña ración de vino.2 Ambos experimentaron alucinaciones visuales y auditivas. Para el tercer día estaban tan deshidratados que dejaron de transpirar. Finalmente, al cuarto día, un beduino en camello los descubrió, salvándoles la vida. El relato Tierra de hombres (Terre des hommes), es una referencia a esta experiencia.

[editar]Desaparición

Un Lockheed P-38 F5B, avión en el que desapareció Antoine de Saint-Exupéry.

Después de 27 meses en América del Norte, Saint-Exupéry regresó a Europa para volar con las Fuerzas francesas libres y luchar con los Aliados en un escuadrón basado en elMediterráneo. Con 43 años, no sólo era más viejo que la mayoría de los hombres en servicio, sino que también sufría dolores, debido a sus múltiples fracturas. Fue asignado con algunos otros pilotos a un escuadrón de cazas bimotor P-38 Lightning, que un funcionario describió como aeronaves "desgastadas por la guerra, sin condiciones de aeronavegabilidad".3 Después de destrozar un P-38 debido a una falla de motor en su segunda misión, se quedó en tierra durante ocho meses, pero fue reinstalado en misiones de vuelo por la intervención personal del General Eisenhower. Charles de Gaullepúblicamente afirmó que Saint-Exupéry apoyaba a Alemania. Deprimido por esto, el piloto comenzó a beber en exceso.4

La última misión de reconocimiento de Saint-Exupéry fue recoger información de inteligencia sobre los movimientos de las tropas alemanas en el valle del Ródano y sus alrededores antes de la invasión aliada del sur de Francia ("Operación Dragoon"). En la noche del 31 de julio de 1944, despegó a bordo de un P-38 sin armamento de una base aérea en Córcega, y no regresó. Una mujer informó haber visto el 1 de agosto un accidente aéreo alrededor del mediodía, cerca de la Bahía de Carqueiranne junto a Tolón. Un cadáver sin identificar usando insignias franceses fue encontrado varios días después al este del archipiélago Frioul al sur de Marsella y enterrado en Carqueiranne en septiembre.

[editar]Descubrimiento en el mar

Brazalete de Saint-Exupéry hallado en 1998.

En 1998, un pescador llamado Jean-Claude Bianco encontró, al este de la isla de Riou, al sur de Marsella, una pulsera de plata de identidad (gourmette) con el nombre de Saint-Exupéry y de su esposa Consuelo5 y sus editores, Reynal y Hitchcock, enganchado a un trozo de tela, probablemente de su traje de vuelo. En 2000, un buzo llamado Luc Vanrell encontró los restos de un P-38 Lightning esparcidos en el fondo del mar frente a las costas de Marsella, cerca de donde se encontró el brazalete. Los restos del avión fueron recuperados en octubre de 2003.5 El 7 de abril de 2004, investigadores del Departamento de Arqueología Subacuática confirmaron que los restos del avión encontrados eran, ciertamente, los del P-38 F-5B de reconocimiento de Saint-Exupéry. No se encontraron marcas o agujeros atribuibles a disparos. Sin embargo esto no fue considerado significativo, ya que sólo se recuperó una pequeña parte de la aeronave.6 En junio de 2004, los fragmentos fueron entregados al Museo del Aire y del Espacio en Le Bourget.7

La ubicación del lugar del accidente y el brazalete está a menos de 80 km por mar de Carqueiranne, donde se encontró el cadáver del soldado francés desconocido, por lo cual es plausible, aunque no se ha confirmado, que el cadáver fue llevado hasta ahí por las corrientes marinas tras el accidente.

[editar]Especulaciones de marzo de 2008

En marzo de 2008, Horst Rippert (hermano del cantante Iván Rebroff), de 85 años de edad y expiloto de la Luftwaffe narró a La Provence, un periódico de Marsella, que atacó y derribó un P-38 Lightning el 31 de julio de 1944 en la zona donde se encontró el avión de Saint-Exupéry.7 8 9 Rippert, que estaba en una misión de reconocimiento sobre el mar Mediterráneo, dijo que vio y atacó a un P-38 con un emblema francés, cerca de Tolón.10 Rippert, que dijo haber visto como se estrelló el P-38 en el mar, fue el segundo veterano de la Luftwaffe en afirmarlo públicamente, luego que Robert Heichele mencionara en 1981 que él derribó el avión de Saint-Exupéry.

Tras la guerra, Horst Rippert fue reportero de televisión y dirigió la sección deportiva del canal ZDF. Publicó un libro donde mencionaba el posible derribo de Saint-Exupéry10 11 La historia de Rippert no es verificable y fue recibida con criticismo por algunos investigadores franceses y alemanes.12 13


 

[editar]Conmemoraciones

En el sexagésimo aniversario de la muerte de Saint-Exupéry, se realizaron dos ceremonias conmemorativas en Marsella y en el aeropuerto de Bastia en Córcega, cercano al lugar donde ocurrió la muerte y el último despegue del aviador respectivamente; se colocaron flores y se celebró una misa a la que asistió un familiar del aviador.

En Buenos Aires, donde conoció a la que más tarde sería su esposa, Consuelo Suncín, fue nombrado director de la Aeroposta Argentina, filial de la Aéropostale, donde tuvo la misión de organizar la red de América Latina. Tal es el marco de su segunda novela,Vuelo nocturno. En 1931, la bancarrota de la Aéropostale puso término a la era de los pioneros, pero Saint-Exupéry no dejó de volar como piloto de prueba y efectuó varios intentos de récords, muchos de los cuales se saldaron con graves accidentes: en el desierto egipcio en 1935, y en Guatemala en 1938».14

[editar]Obras

Nota: Las obras desde Ciudadela hasta las más recientes han sido publicadas póstumamente.

[editar]Referencias

  1.  Nombre sin «-» en el estado civil — con «-» en otras situaciones.
  2.  Schiff, Stacy. Saint-Exupéry: A Biography. New York: 1994, A.A. Knopf. p. 258
  3.  Cate, Curtis, Antoine de Saint-Exupéry: His Life and Times, Longmans Canada Limited, 1970.
  4.  Buckley, Martin (7 de agosto de 2004). «Mysterious wartime death of French novelist». BBC News, World Edition (BBC).
  5.  a b Saint-Exupery committed suicide says diver who found plane wreckage, published by the Cyber Diver News Network, 7 August 2004.
  6.  «Riou island's F-5B Lightning, Rhône's delta, France. Pilot: Commander Antoine de Saint-Exupéry». Aero-relic.org. Consultado el 10 de agosto de 2009.
  7.  a b "Antoine de Saint-Exupéry aurait été abattu par un pilote allemand", 15 March 2008 report in Le Monde
  8.  "Wartime author mystery 'solved'" report shown at the BBC News site on Monday, 17 March 2008
  9.  [1] New York Times, "Clues to the Mystery of a Writer Pilot Who Disappeared", 11 April 2008
  10.  a b "Ivan Rebroffs Bruder schoss Saint-Exupéry ab" 15 March 2008 Agence France-Presse (en alemán)
  11.  German Pilot Fears He Killed Writer St. Exupéry, 16 March 2008 Reuters news story quoting Rippert in Le Figaro. Retrieved 16 March 2008.
  12.  Georg Bönisch, Romain Leick, "Gelassen in den Tod" Der Spiegel, No. 13, 22. March 2008
  13.  Jürg Altweg, "Aus Erfahrung skeptisch: Französische Zweifel an Saint-Exuperys Abschuss durch Horst Rippert", Frankfurter Allgemeine Zeitung, 28 March 2008, No. 32, S. 44
  14.  «Biografía de Antoine Saint-Exupéry».

[editar]Enlaces externos

Consuelo de Saint-Exupéry

 
 
Consuelo de Saint-Exupéry
Consuelodesaintexupery.jpg
Fotografía de Consuelo de Saint-Exupéry.
Nacimiento 10 de abril de 1901
Flag of El Salvador.svg Armenia, Sonsonate,El Salvador
Defunción 28 de mayo de 1979
Grasse, Francia
Ocupación Artista yEscritora|Pintora|Poeta
Nacionalidad Argentina/Francesa
Género Autobiografía, poesia

Consuelo de Saint-Exupéry, de soltera Consuelo Suncín-Sandoval Zeceña(Armenia, Sonsonate, El Salvador, 10 de abril de 1901 - Grasse, Francia, 28 de mayode 1979) fue una escritora y artista salvadoreña-francesa, y esposa del famoso escritor y aviador Antoine de Saint-Exupéry, creador de El Principito.

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[editar]Infancia y adolescencia

Consuelo Suncín nació en una ciudad pequeña de nombre Armenia, del Departamento de Sonsonate, en El Salvador en una familia de ricos terratenientes, el coronel Don Félix Suncín y Doña Ercilia Sandoval Zeceña, quienes tuvieron tres hijas: Ana Dolores, Consuelo y Amanda. Consuelo estudió en el extranjero, en San Francisco, en laCiudad de México, y en Francia.

Llegó a San Francisco con 19 años y una beca para estudiar inglés. Allí conoció al que sería su primer marido, Ricardo Cárdenas, obteniendo el permiso oficial un 15 de mayo de 1922, en la ciudad de San Francisco, del Estado de California, con el que se casó nada más al cumplir la mayoría de edad, hasta hace poco se mencionaba que se había casado con un militar, lo cual no es cierto - esto probablemente resultado de la capacidad imaginativa de Consuelo, por tratar de salir adelante en su vida - pero el joven Ricardo, de tez blanca y de padres de nacionalidad mexicana, trabajaba como dependiente en un almacén de pinturas, al tanto que Consuelo vivía en el 562 Maller Street, habiendo sido oficiada la ceremonia por el Juez de la Corte Superior de California para esa época. R. Cárdenas murió a los pocos meses en un accidente de ferrocarril.

Viuda y con 22 años se fue a México, donde inició estudios de Derecho, aunque los abandonó pronto cambiándolos por los dePeriodismo. Durante su estancia en Francia, Consuelo contrajo matrimonio con Enrique Gómez Carrillo, diplomático guatemalteco, escritor y periodista. Después de la muerte de Gómez-Carrillo en 1927 a causa de un derrame cerebral, a los once meses de la boda, Consuelo que se encontraba nuevamente viuda y dueña de una gran fortuna tomó residencia en Buenos Aires, Argentina, en donde obtuvo la nacionalidad de este país. Tenía 25 años.

[editar]Matrimonio con Saint-Exupéry

En 1931, estando en Buenos Aires, su amigo Benjamin Crémieux le presentó a Antoine de Saint-Exupéry, que por ese entonces estaba afincado en esa ciudad y tenía a su cargo la Compañía Aeroposta. El flechazo fue inmediato. Consuelo y Antoine estuvieron a punto de casarse en Buenos Aires, pero la ceremonia finalmente tuvo lugar en Francia, donde se trasladaron a vivir.

Su unión matrimonial, que se alargó durante quince años, fue muy turbulenta por la profesión de piloto de su marido, su gusto por la vida bohemia, su éxito como artista y escritor, y sus incontables amantes. Todo ello los distanció, aunque tenían encuentros esporádicos durante los que vivían momentos de auténtica felicidad. No en vano, la rosa de El Principito es un homenaje de Saint-Exupéry a su esposa. Su infidelidad y dudas acerca del matrimonio son simbolizadas por el campo de flores que se encuentra el pequeño príncipe en la Tierra. Sin embargo, el zorro le dice que su rosa es especial, porque es a ella a la que realmente quiere.

A pesar de tener un matrimonio 'sinigual', Antoine guardó a Consuelo cerca de su corazón. Ella es un personaje importante en El Principito como su "flor", que "creció" en su planeta y que él protege bajo una campana de cristal.

[editar]Fallecimiento

Consuelo murió de un ataque de asma en Grasse, Francia el 28 de mayo de 1979 y es enterrada en el cementerio de Père-Lachaiseen París junto a los restos de su segundo marido Enrique Gómez Carrillo. Legó todos sus bienes y derechos a su jardinero.

[editar]Memorias de la rosa

Después de la desaparición de su marido en 1944, Consuelo escribió su vida junto a él, en 1946, en un manuscrito en francés tituladoMémoires de la rose. Estas memorias nunca fueron publicadas en el curso de su vida.

El azar quiso que recientemente se hallara esta obra, transcurridos más de cincuenta años desde que fuera escrita. Su heredero universal, José Martínez-Fructuoso, dudó mucho antes de tomar la decisión de revelar la existencia del manuscrito. Verdaderamente,Antoine de Saint-Exupéry no sale muy bien parado, aunque se desmitifica al ídolo a la vez que recibe la humanidad que se le suele negar.

El Cuento de la Rosa, sus varias pinturas, y las cartas íntimas fueron encontrados y publicados en 1999. Estas memorias se convirtieron en unas de las memorables y más importantes de Francia. La relación con su marido fue retratada también por Bruno Ganz y Miranda Richardson en la película Saint-Exupéry: La Caja de Historia.

[editar]Las Ilustraciones de Ella

Durante la primera y segunda guerra mundial, el escritor colombiano Germán Arciniegas relató que cada uno habló sobre Consuelo como un volcán pequeño de El Salvador que vertió sus llamas en las azoteas de París y que «[ella] estaba siempre presente en cada una de las historias de su segundo marido Enrique Gómez Carrillo y su tercer marido, Antoine de Saint-Exupéry».

"Recuerdo los ojos de mi esposa otra vez. Nunca veré cualquier cosa más aparte de esos ojos. Ellos preguntan."
 

Antoine de Saint Exupéry, Terre des Hommes, 1939

[editar]Otras referencias

La esposa de Saint Exupéry aparece en un relato corto llamado Los Tres Deseos del libro Tierra de Infancia de Claudia Lars, amiga de la infancia de Consuelo Suncín. Cuando se conocieron en Sonsonate, tres niñas expresan sus deseos para cuando sean mayores y Consuelo Suncín dice que será una reina de un país lejano.

[editar]Enlaces

Quién fué y qué escribió Antoine de Saint Exupéry?

La Argentina parece conocerlo por su gran obra "El principito", ese libro que dedicó a los niños que aún viven en nosotros. Sin embargo, su obra más madura tal vez sea "Tierra de hombres", donde el autor desarrolla, a partir de sus vivencias en la aviación, una tesis sobre la humanidad. La profunda, trabajada, visión humanista de su texto se emparenta, cómo no, con la postura existencialista mejor desarrollada años más tarde por Camus y Sartre.

Antoine de Saint Exupéry (se pronuncia "antuán de sen exuperí" o algo bastante parecido) nació el 29 de junio de 1900 en Lyon. Su nombre completo era Antoine Jean Baptiste Marie Roger de Saint Exupéry. A los doce años, en julio de 1912, voló por primera vez. Luego escribió, recordando aquél día

«...Las alas temblaban bajo el soplo del atardecer,
El motor con su canto mecía el alma adormecida,
Y el sol nos rozaba con su luz lívida...»

Es Imposible aprehender la vivencia de Saint Exupéry si no se experimenta, al menos una vez, la magia del vuelo. Recomiendo, prescribo, un vuelo de bautismo cuanto antes al lector. Hágase un par de horas de tiempo, váyase hasta el aeródromo más cercano y hable con uno de esos personajes, los pilotos. Pídale que lo lleve a volar. En el peor de los casos, tendrá que pagar la tarifa del vuelo, no mata a nadie.  Cuando esté allá arriba, mire la tierra, sembrada de casas, surcos, antenas, luces, humos de fogatas.., verá la cara de un planeta donde la humanidad labra su huella. Vea, imagine cada una de esas casas anidando las familias de los hombres. Imagine esas fábricas repletas de camaradas que trabajan juntos, bromeando, maldiciendo tal vez. Mire la lejana lombriz de un tren que atraviesa los campos y piense en los pasajeros, el centenar de historias de vida que conviven en ese instante, a bordo de un vagón. Y piense también que esa costura en el planeta, la vía; alguna vez fue solamente un dibujo en la mesa de trabajo de un proyectista que quizá nunca vió su plano hecho realidad. Usted lo verá. Piense en ello. Ésa es la experiencia del vuelo, no la aventura estúpida de los buscadores de adrenalina. De estas cosas, del hombre y de la humanidad, nos habla Saint Exupéry cuando vuela y nos invita a volar junto a él.

En junio de 1914, al final del curso, recibió el premio de narrativa de su clase por su relato: ODISEA DE UN SOMBRERO DE COPA.

En el mismo mes, su tío Roger de Saint-Exupéry, murió en combate al frente de su batallón, en Maissin.

En 1918 Conoció entonces a la que seriá su novia: Louise de Vilmorin.

En 1919,  durante quince meses, Antoine siguió, como auditor libre, las clases de la Escuela de Bellas Artes de París, sección arquitectura. Paralelamente, atraviesa dificultades económicas que tiene que desempeñar varios pequeños empleos como este que le lleva a actuar como figurante, con su amigo Henry de Ségogne, en la ópera de Jean Noguès: QUO VADIS.
El 2 de abril, ingresó en el 2º Regimiento de Aviación de Caza, en Neuhof, cerca de Estrasburgo.
Aprendió a pilotar con el monitor Robert Aeby, piloto de la Cia. Transaérea del Este.
En junio, realizó sus primeros vuelos con monitor en un FARMAN F-40 y, el 9 de julio, voló por primera vez en solitario sobre elSOPWITH F-CTEE. El día en que un piloto vuela solo por priera vez queda grabado para siempre en la memoria. Ese el día más importante y en ese momento se inicia el verdadero romance con las nubes. 
El mismo mes de julio de 1921, embarcó rumbo a Casablanca, en Marruecos, para integrarse a su nueva unidad, el 37º Regimiento de Aviación de Caza.
El día 23 de enero de 1922, se encontraba en Istres, como cadete; piloteando aviones CAUDRON G-3. 
El 5 de febrero, recibió los galones de cabo. Seguidamente, consiguió su licencia de piloto militar.
En abril, fue enviado a la base de Avord, cerca de Bourges, para seguir un cursillo de observador aéreo.
El 10 de octubre, recibió el grado de alferez, e ingresó en el 34º Regimiento de Aviación, en Le Bourget, cerca de Paris.
En 1923 se anunció oficialmente su compromiso matrimonial con Louise de Vilmorin.
En la primavera, sufrió su primer accidente de aviación en Le Bourget, cerca de París, del que salió con una fractura de craneo, con lo cual terminó su servicio militar.
En septiembre, Louise de Vilmorin rompió su compromiso matrimonial...
El día 1 de abril de 1926, publicó L'AVIATEUR (EL AVIADOR), su primer trabajo impreso, en el Navire d'Argent (El Barco de Plata), una revista dirigida por Adrienne Monnier.
Consiguió su título de piloto de transporte y, el 11 de octubre, ingresó como piloto en la "Compagnie Latécoère", que aseguraba el transporte aereo del correo entre Toulouse (Francia) y Dakar (Africa).
1927 
El 10 de octubre, lo destinaron, como jefe de aeroplaza en Cabo Juby, en el antiguo Río de Oro, territorio del Sahara Español.


El primer vuelo nocturno tuvo lugar el 16 de abril de 1928 en la linea Rio de Janeiro-Buenos Aires.
Mientras tanto, en Marruecos, el 20 de junio, los pilotos Reine y Serre caían en manos de las kabilas disidentes moras. El 17 de septiembre, Saint-Exupéry intentó rescatarlos con su avión, pero no lo consiguió y quedaron cautivos 117 días. El 19 de de octubre, un avión español cayó en el territorio de los disidentes, debido a una avería. Saint-Exupéry salió en su búsqueda, y consiguió traerse al teniente y a su intérprete, heridos los dos.
En noviembre, nuevo salvamento excitoso del piloto Vidal y de su intérprete moro Lahoucine.
1929 
Junto con los también míticos pilotos Jean Mermoz y Henri Guillaumet, Antoine de Saint-Exupéry voló con destino a América del Sur para estudiar, sobre el terreno, la posibilidad de crear nuevas lineas aereas regulares.
El 12 de octubre, llegaron a Buenos Aires dónde Antoine tomó posesión de su cargo de Director de la Compañía "Aeropostal Argentina".
En los meses que siguen, crearon la linea de Patagonia que unió, en adelante, las ciudades de Buenos Aires y Punta Arenas.
Se editó su nuevo libro COURRIER SUD (CORREO DEL SUR).
1930 
El 7 de abril de ese año, recibió la dignidad de Caballero de la Legión de Honor francesa, por su labor en la aeronautica civil.
El 13 de junio, su compañero y amigo Guillaumet desapareció en vuelo en los Andes, a bordo del Laguna Diamante. Cuando apareció, luego de varios días de búsqueda, Antoine le escucha decir las palabras que luego harían uno de los mas hermoso capítulos de su literatura. Guillaumet, el hombre, desfalleciente pero triunfante, extenuado luego de la larga caminata en busca de la salvación, le dice a su camarada, refiríendose a la hazaña de sobrevivir: "Lo que hice, te lo juro, no lo hubiera hecho ningún animal."

En marzo de 1931, contrajo matrimonio con Consuelo Suncin.
Desde mayo a diciembre, Antoine realizó varios vuelos nocturnos en la línea Casablanca-Port Etienne. 
En diciembre, recibió el premio literario Femina-Vie Heureuse por su obra VOL DE NUIT (VUELO NOCTURNO), que consiguió un gran éxito en librerías.
En febrero de 1932, volvió a pilotar - esta vez hidroaviones- en la linea Marsella-Argel.
Saint-Exupéry es, en 1933, piloto de pruebas en la empresa "Société de Constructions Latécoère" y, al poco tiempo, piloto encargado de la recepción de las aeronaves.
Sufrió un nuevo accidente a bordo de un hidroavión Laté, en el mar, frente a la localidad francesa de Saint-Raphaël.
En abril, "Air France" requirió sus servicios para unas misiones, en Francia y en el extranjero.
Así, el 12 de julio salió de Marsella hacia Saïgon, en el sureste asiático.
Sufrió un nuevo percance con un hidroavión, y tuvo que realizar un amerizaje forzoso en la desembocadura del rio Mekong, cuando volaba hacia Angkor.
En diciembre de 1935, protagoniza un nuevo "raid" París-Saïgon, a bordo del CAUDRON SIMOUN F-ANRY que acababa de comprar.
El domingo 29, fue el vuelo fatal: despegaron de Benghazi a las 23 horas.
Cuatro horas mas tarde, su avión chocó, a 260 km/h con la cumbre de una meseta, en el desierto de Libia, y fue arrastrado unos 200 m sin volcar. 
Se les consideró como desaparecidos.
El día 1 de enero de 1936, a las 18 horas, se les localizó por fín. De esta época data el accidente que cuenta en Tierra de Hombres (que transcribimos parcialmente en un fragmento más abajo)
Volvió a Paris donde publicó el relato de su aventura en L'Intransigeant y grabó, para la radio, ATERRIZAJE FORZOSO EN EL DESIERTO. Pocos meses después estalló la Guerra-Civil en España y, en agosto, Saint-Exupéry voló a Barcelona, por cuenta del periódico parisino L'intransigeant, para realizar un reportaje sobre el frente de Lerida.
El 8 de diciembre, su amigo Jean Mermoz desapareció a bordo de su avión en el Atlántico Sur.

Saint-Exupéry le consagró varios artículos en la prensa y emisiones en la radio. 
En junio de 1937, el periódico "Paris-Soir" le requirió de nuevo para un reportaje, esta vez en Madrid.
En febrero de 1938, intentó realizar una nueva proeza volando desde Nueva York a Tierra de Fuego. En Guatemala, sufrió otro accidente: debido a una sobrecarga de las reservas de carburante, el avión se estrelló al final de la pista. Herido de gravedad, volvió el 28 de marzo a Nueva York dónde permaneció convalescente durante unos meses, en casa del General Donovan.
En 1939 fue elevado a la dignidad de Oficial de la Legión de Honor.
Su nuevo libro TERRE DES HOMMES (TIERRA DE LOS HOMBRES) salió en febrero.
El 29 de mayo, se encuentra en Parentis-en-Born, con Guillaumet, para dar los últimos toques al avión Lieutenant-de-Vaisseau Pariscon el que va a intentar cruzar el Atlántico Norte, en un viaje de ida y vuelta, proeza que realizó con exito entre los días 7 y 14 de julio.
En agosto, pasó otra temporada en Nueva York y, el 26, se embarcó de vuelta para Francia en el Ile-de-France.
El 2 de septiembre, se declaró la guerra.
El 4 de septiembre, Antoine fue enviado a Toulouse donde se encargó de la formación de nuevos pilotos en el aerodromo de Montaudran.
La autoridad militar lo declaró "no apto" para realizar misiones de guerra, debido a su mal estado físico, por los numerosos accidentes sufridos.
El 3 de noviembre, se incorporó al grupo de reconocimiento aereo 2/33.
Con aviones Potez 63/7 y Potez 63/11, realiza misiones de reconocimiento aéreo sobre Alemania y sobre la ciudad de Arras que le valdrán una mención del Ejercito del Aire y la adjudicación de la Medalla de Guerra. De las vivencias de esta época se nutre su libro"PILOTO DE GUERRA"
En diciembre, recibió el Gran Premio de la Academia Francesa por su libro TIERRA DE HOMBRES y el National Book Award deEstados Unidos por su versión en inglés: WIND, SAND AND STARS. 
El 29 de marzo de 1940, realizó su primera misión de guerra al mando de un Bloch 174. Poco tiempo después fue desmoviliazdo a causa de la derrota de Francia
En el verano, se embarcó en Lisboa en el Siboney; realizó el viaje con el cineasta francés Jean Renoir.
El 27 de noviembre, su otro gran amigo Guillaumet fue ametrallado y abatido con su avión cuando sobrevolaba el Mediterraneo.

En diciembre, Saint-Exupéry salió para Nueva york.
1942 
Su nuevo libro PILOTE DE GUERRE (PILOTO DE GUERRA), salió el 20 de febrero.
Del 1 al 5 de mayo, viajó a Canada, dónde dió varias conferencias.
El 29 de noviembre, publicó en el "New York Times Magazine" y en el "Canada", de Montréal: "AN OPEN LETTER TO FRENCHMEN EVERYWHERE" (CARTA ABIERTA A LOS FRANCESES DE TODAS PARTES); el título original en francés de este texto es algo distinto: "VOULEZ-VOUS, FRANÇAIS, VOUS RECONCILIER?"(DESEAIS, FRANCESES, RECONCILIAROS?)...
1943 
En febrero, publicó "LETTRE A UN OTAGE" (CARTA A UN REHEN).
El 6 de abril, salió la que posiblemente sea su obra más divulgada: "LE PETIT PRINCE" (EL PEQUEÑO PRINCIPE, generalmente titulado, de forma poco acertada, EL PRINCIPITO por la editoriales españolas).
Multiplicó sus solicitudes para volver al servicio activo y por fín, el 4 de julio, integró como capitán el "7º Ejercito Americano".
El 21 de junio, realizó su primera misión sobre la Francia ocupada al mando de un Lightning P38 
Fue ascendido a comandante el 25 de junio.
El 12 de agosto, vuelvió otra vez a la reserva.
1944 
Ante su insistencia para volver, fue enviado de nueva a su escuadrilla, a la que se incorporó, el mismo dia, en su base de l'Alghero, en Cerdeña.
Escribió para la revista Life su Carta a los jovenes americanos a instancia del reportero John Philips, que hace las últimas fotos deSaint-Exupéry en la pista y en su avión, hoy en día las más celebres.


El 14 de junio, realizó su primera misión desde su vuelta. 
El 29 d julio, el coronel Chassin se encuentró con él en Argel y le aconsejó que lo deje ya: lo puede hacer, con todos los honores, ya que el solo ha realizado mas misiones de reconocimiento fotográfico sobre Francia que cualquiera de sus compañeros, mas jóvenes, en un año.
"Es imposible, le contestó Saint-Exupéry, me quedaré con mis compañeros hasta el final..."
El 31 de julio, es su última misión de reconocimiento sobre Grenoble y Annecy: su avión despegó a las 8 h. 45. Dispone de carburante para 6 horas de vuelo.
A las 14 h. 45, no había regresado...

El 3 de noviembre, a título postumo, recibe los mayores honores del ejército.

Fragmentos de "Tierra de Hombres", un libro imprescindible, maravilloso.

Antoine de Saint Exupery, él, él mismo, el piloto escritor, se ha quedado varado en medio del desierto de Libia. Él y su compañero enfrentan la muerte, a la sombra de un avión averiado. No hay desierto tan seco y caluroso. Y tan lejos están de toda tierra habitada...

Eligen caminar hacia el este, en busca de la costa. Esta historia real finaliza cuando un par de días después, un beduino los encuentra, ya desfallecientes y le ofrece su agua. Las palabras que Saint Exupery le dedica a este hombre salvador son una declaración de humanismo existencialista.

"En cuanto a ti que nos salvas, beduino de Libia, te borrarás, sin embargo, para siempre de mi memoria. No me acordaré nunca de tu rostro. Tú eres el Hombre y te me apareces con la cara de todos los hombres a la vez. Nunca fijaste la mirada para examinarnos, y nos has reconocido. Eres el hermano bien amado. Y, a mi vez, yo te reconoceré en todos los hombres.

Te me apareces bañado de nobleza y benevolencia, gran señor que tienes el poder de dar de beber. Todos mis amigos, todos mis enemigos, en ti marchan hacia mí, y no tengo ya un solo enemigo en el mundo."

Antoine de Saint Exupery. "Tierra de hombres".

Aquí se dirige a un pequeño burgués, compañero de la aerolínea. Palabras de Antoine de Saint Exupery a un hombre poco digno de su humanidad:

"Viejo burócrata, camarada aquí presente, nadie te ha permitido evadirte y de ello no eres responsable. Has construido tu paz a fuerza de bloquear con cemento, como la hacen las termitas, todas las salidas hacia la luz. Has rodado como una bola tu seguridad burguesa; en tus rutinas, en los mitos asfixiantes de tu vida provinciana, has alzado esa humilde muralla contra los vientos y las mareas y las estrellas. No quieres inquietarte con los graves problemas, bastante trabajo has tenido con olvidar tu condición de hombre. No eres el habitante de un planeta errante. No planteas preguntas sin respuesta, eres un pequeño burgués de Toulouse. Nadie te ha sacudido por los hombros cuando aún era tiempo. Ahora la arcilla con la cual estás hecho se ha secado y endurecido y nada en ti podría, en adelante, despertar al músico, o al poeta, o al astrónomo que quizá te habitaban al principio."

Antoine de Saint Exupery. "Tierra de hombres"

Palabras de Saint Exupery sobre la muerte, aquella que tantas fintas, tantos gambitos terribles jugó con él. FInalmente, se referirá al sentido de la vida.

"Cierta vez he estado junto a tres campesinos, ante el lecho de muerte de su madre. Y en verdad que era doloroso. Por segunda vez se cortaba el cordón umbilical. Por segunda vez se deshacía el nudo: el que liga una generación con la otra. Estos tres hijos se hallaban, de pronto, solos, teniendo que aprenderlo todo, privados de una mesa familiar donde reunirse los dias de fiesta, prIvados del polo donde se encontraban todos. Pero descubrí, también, en esa ruptura, que la vida puede ser dada por segunda vez. Esos hijos, también ellos, a su vez, se harían cabezas de fila, puntos de reunión y patriarcas, hasta el momento en que les llegase el turno de transmitir el mando a la camada de pequeños que jugaban en el patio.

Miraba a la madre, a esa vieja campesina de apacible y duro rostro, de labios apretados, su rostro convertido en máscara de piedra. Y reconocía en ella el rostro de sus hijos. Esa máscara había servido para imprimir la de ellos. Aquel cuerpo había servido para imprimir estos cuerpos, estos hermosos ejemplares de hombres. Ella reposaba rota, pero como una ganga de la que se ha sacado el fruto. A su vez, hijos e hijas de su carne, imprimirían pequeños hombres. No se muere en la granja. La madre ha muerto, ¡viva la madre!

Dolorosa, sí, pero tan simple esta imagen del linaje, abandonando uno tras otro, sobre su camino, los hermosos despojos de cabellos blancos, marchando hacia vaya a saber uno qué verdad, a través de su metamorfosis.

Por ello, esa misma noche, la campana de los muertos de la aldea me pareció cargada, no de desesperación, sino de una alegría discreta y tierna. Ella que celebraba con la misma voz los entierros y los bautismos, anunciaba una vez más el paso de una generación a otra. Y solo se experimentaba una gran paz al oír cantar los esponsales de una pobre vieja con la tierra."

Lo que se transmitía así, de generación en generación, con el lento progreso de un crecimiento de árbol, era la vida, pero era también la conciencia. ¡Qué misteriosa ascención! De una lava en fusión, de una pasta de estrella, de una célula viva germinada por milagro hemos brotado, y, poco a poco, nos hemos elevado hasta escribir cantatas y pesar vías lácteas.

La madre no había transmitido solo la vida: ella había enseñado un lenguaje. Había confiado a sus hijos el caudal tan lentamente acumulado en el curso de los siglos, el patrimonio espiritual   que ella misma había recibido en depósito, ese pequeño lote de tradiciones, de conceptos y de mitos que constituye toda la diferencia que separa a Newton o Shakespeare del bruto de la cavernas.

Lo que sentimos cuando tenemos hambre, esa hambre que impulsaba a los soldados de España bajo los disparos hacia la lección de botánica, que impulsó a Mermoz hacia el Atlántico Sur, que impulsaba a alguien hacia su poema, es que el Génesis no está acabado y que necesitamos alcanzar conciencia de nosotros mismos y del universo. Tenemos que tender pasarelas en la noche. Esto lo ignoran sólo aquellos que forman su sabiduría en una indiferencia que creen egoísta. ¡Pero todo desmiente a esa sabiduría! Camaradas, camaradas míos, yo os tomo por testigos: ¿Cuándo nos hemos sentido felices?"

Antoine de Saint Exupery. "Tierra de hombres".

Por favor, leete esta denuncia de la condición humana. Saint Exupery viaja en un tren cuya tercera clase va repleta de obreros polacos deportados de Francia. Retrata un paisaje terrible, de gente embrutecida por los años y la adversidad, de pronto, algo le llama la atención entre el pasaje.

"Me senté frente a una pareja. Entre el hombre y la mujer, el niño bien o mal había hecho un hueco y dormía. Pero se dió vuelta en sueños y su cara se mostró bajo la lamparilla. ¡Ah, Qué niño adorable! Había nacido de esa pareja una especie de fruto dorado. había nacido de esa tosca manada este logro de encanto y de gracia. Me incliné sobre esta frente lisa, sobre este dulce ademán de los labios y me dije: he aquí un rostro de músico, he aquí a Mozart niño, he aquí una hermosa promesa de vida. Los principitos de leyenda no eran diferentes a él: protegido, rodeado, cultivado. ¡Qué no llegaría a ser! Cuando por mutación nace en los jardines una nueva rosa, todos los jardineros se conmueven. Se aísla la rosa, se la cultiva, se la favorece. Pero no hay jardinero para los hombres. Mozart niño será marcado como los otros en la máquina de troquelar. Mozart hará sus más altas alegrías de la música podrida en la fetidez de los cafés cantantes. Mozart está condenado.

Y regresé a mi vagón. Me decía: esa gente apenas sufre de su suerte. No es la caridad la que me atormenta. No se trata de enternecerse sobre  sobre una llaga eternamente reabierta. Los que la llevan no la sienten. Es algo como la especie humana y no el individuo lo que es herido aquí, el que es lesionado. Apenas creo en la piedad. Lo que me atormenta es el punto de vista del jardinero. Lo que me atormenta no es esta miseria en la cual, después de todo, uno se instala tan bien como en la pereza. Generaciones de orientales viven en la mugre y se complacen en ella. Lo que atormenta no lo  curan las sopas populares. Lo que me atormenta no son esos huecos, ni esos bultos, ni esa fealdad. Es, en estos hombres, un poco, Mozart asesinado."

Siempre se admiró el valor de Saint Exupéry. No es para menos. Vivía arriesgando su vida y cosas aún más delicadas todavía. ¿Pero qué opinaba él mismo del valor?

"Acabo de realizar una pequeña hazaña: he pasado dos dias y dos noches con once moros y un mecánico, para salvar un avión. Tuvimos diversas y graves alarmas. Por primera vez, he oído silbar las balas sobre mi cabeza. Conozco, por fin, lo que soy en esas circunstancias: mucho más sereno que los moros. Pero he comprendido, al mismo tiempo, lo que siempre me había sorprendido: por qué Platón, (¿o Aristóteles?) sitúa al valor en la última categoría de las virtudes. Es que no está formado por muy hermosos sentimientos: algo de rabia, algo de vanidad, mucha testarudez y un vulgar placer deportivo. Sobre todo, la exaltación de la propia fuerza física que, no obstante, no le atañe en nada. Cruzamos los brazos sobre la camisa desabrochada, y respiramos fuerte. Es más bien agradable. Cuando esto se produce durante la noche, se le mezcla el sentimiento de haber hecho una inmensa tontería. Jamás volveré a admirar un hombre que solo sea valeroso."

Links a otras páginas sobre Saint Exupéry y su obra

Página de Saint Exupéry del CIRCULO LITERARIO DEL ATENEO DE ALICANTE http://www.chez.com/deji/se_esp/seme_esp.htm con abundante información, fotografías, documentos y datos biográficos. (de allí se tomaron los que se dan en esta página)
Un hermoso poema dedicado a SaintEx por Juan Meneguín      www.fabiancasas.com.ar  Si querés comunicarte conmigo escribime a fabian@amautas.com